martes, 17 de diciembre de 2013

¡Felices fiestas! O ¿Felices fiestas?



Por alguna extraña razón, a estas alturas del año, lo único que queremos es que el mes se acabe, como si por arte de magia, las cosas fueran a ser distintas a partir del 1° de enero. Como si al gritar con fuerzas ¡feliz año nuevo! Nuestro cansancio acumulado fuese a desaparecer y pudiésemos dar vuelta la página y hacer borrón y cuenta nueva. Sí. A todos nos pasa.  

Por otro lado, diciembre es también un mes algo confuso en cómo nos predisponemos a vivirlo y cómo lo vivimos en realidad.

El espíritu de la Navidad, del amor y buenos deseos, comienzan a inundar el ambiente (a unos los toca más que a otros, claro está) y generamos distintas actividades para celebrarlo: la fiesta de fin de año, la navidad de la empresa que incluye a la familia, y el ya tan instalado “amigo secreto”, entre otras.

Sin embargo, estas instancias que hemos creado para disfrutar, muchas veces terminan transformándose de una carga más; en una tarea más de aquellas miles que tenemos, laboralmente, para cerrar el año, y dejamos de disfrutar.

Te quiero invitar. A detenerte un momento… respira… profundo… y observa.

Observa como este tiempo está para recordarnos aquellos elementos positivos de nuestra rápida y acelerada vida cotidiana. Esa vida que muchas veces nos automatiza en un quehacer que nunca acaba.

Detente. Observa. Recoge. Este año sin duda ha de tener más de algún fantástico momento en el trabajo. Quizás el logro de una meta; el goce de hacer lo que a uno le gusta; las bromas y cafés con los compañeros. Cada uno sabrá. 

Observa como tu trabajo es mucho más que la suma de tareas. También es un espacio de creación, de ejecución, de encuentro humano, de aprendizajes. De momentos buenos y malos que permiten nuestro desarrollo.

En este último artículo del año, no quiero teorizar ni dar “recetas”. Sólo quiero hacerte esta invitación a detenerte y observar. A que te tomes un momento para volver a conectar con aquello que realmente importa. A tomarte un minuto antes de retomar la locura de fin de año, pero ahora, con un poquito más de fuerza, alegría y esperanza. Esperanza en la vida y sus oportunidades.

De todo corazón les deseo, con toda mi alegría y esperanza, que tengan unas maravillosas fiestas junto a sus familias y equipos de trabajo, y que éstas alimenten el espíritu para continuar con nuestra tarea de hacer país todos los días, uno que no dudo, construiremos más feliz.

Publicado en http://asexma.cl/felices-fiestas-o-felices-fiestas/ el 13 de dic de 2013.
Publicado en http://www.cetep.cl/web/?p=7196 el 02/12/2014

jueves, 28 de noviembre de 2013

Modifica tu entorno y crea felicidad en tu trabajo.



Cuando converso con la gente acerca de la felicidad, siempre llegamos a la misma conclusión: todos la queremos. Y cuando hablamos de esto en relación al trabajo, comienzan a aparecer las dudas de su factibilidad. “Sí, es super lindo pensar en la felicidad en el trabajo. Yo puedo hacer mi parte. Pero dile lo mismo a mis jefes” o “el ambiente y las cosas que pasan todos los días, no lo permiten”, son respuestas habituales que me toca escuchar. Por eso, en este artículo, y basándome en el libro La alta rentabilidad de la felicidad de David Fischman, abordaré la siguiente pregunta: ¿Cómo hacemos para cambiar nuestro entorno para ser más felices en nuestro trabajo?


El entorno es un elemento central para nuestras percepciones y conductas. Puede sacar lo mejor de cada uno pero también lo peo de nosotros. El entorno es como un virus contagioso que muchas veces nos toca sin siquiera darnos cuenta.

El entorno, no sólo tiene que ver con las personas, sino con el espacio físico que nos rodea. Un estudio realizado en la Universidad Brigham Young, demostró que las personas que trabajan en un ambiente limpio responden con conductas más morales que las que no. Esto sólo a modo de ejemplo. Les aseguro que todos disfrutamos de un ambiente limpio, luminoso, agradable, que nos hace sentir mejor donde quiera que estemos.

¿Cómo es tu lugar de trabajo? ¿Cómo podrías mejorarlo? Quizás con un buen aroma, flores frescas o fotos
que sean importantes para ti. Mantén un ambiente ordenado (el orden exterior ayuda a mantener un orden interior). Ocúpate de armar un espacio que te provoque emociones positivas. Las personas que experimentan estas emociones suelen ser más creativas, producen más y tienen mejores relaciones interpersonales.

Si es posible, invita a tu equipo a hacer cosas agradable e incluso insólitas o ridículas como por ejemplo “el día de la pantufla”. Inventa actividades que generen un grato ambiente y crea un espacio con sonrisas. Verás como todo fluye mejor y logras mayor compromiso con la empresa. Ahora bien, hazlo como algo permanente incorporándolo en la cultura de tu empresa. No creas que porque lo haces una vez generarás un cambio real. Una vez será sólo una anécdota para recordar.

Lo que somos y lo que hacemos no dependen exclusivamente de lo que ocurre en nuestro mundo interior. Siempre estamos rodeados de un entorno que nos modifica. Para bien o para mal. ¡Incluso la persona más positiva y motivada puede contagiarse de mal ánimo cuando es lo que predomina en el ambiente!

Te invito a realizar cambios. Invita también a tus compañeros. ¡Nada mejor que un rico ambiente en el espacio en el que pasamos gran parte de nuestro día!



Publicado el día 27 de noviembre de 2013 en http://asexma.cl/modifica-tu-entorno-y-crea-felicidad-en-tu-trabajo/

martes, 19 de noviembre de 2013

Premio Acción Joven 2013: refuerzo positivo a un sueño.



Nunca me consideré una emprendedora, al menos no con esa palabra. Sólo me enfrenté a una crisis (el 27F) con ganas de ayudar. Con ello, comenzó a hacerse realidad mi sueño personal: querer hacer un aporte a mi país.

Han sido ya casi 4 años de trabajo intenso. Con altos y bajos; con alegrías y sacrificios, que han ido rindiendo frutos.

He recibido un premio que no puedo considerar sólo mío. Si no hubiese sido por todos quienes han aportado a que este sueño se hiciera realidad, no estaríamos donde estamos ni habríamos alcanzado lo que hemos conseguido. 

Hoy recibo un premio, que acojo más bien como un regalo y un refuerzo positivo a todo lo entregado. Ya no es sólo un sueño. Sino más bien, un aporte a nuestra sociedad, que ha sido valorado por otros agentes sociales, nacionales e internacionales.

Ahora los desafíos son más grandes. Pertenecer a una red internacional de emprendedores sociales jóvenes, quienes también buscan cambiar el mundo. Y lo hacen. Cada uno en su forma.

Tuve la oportunidad de compartir 5 días con los ganadores nacionales. Maravillosas personas, sencillas y poderosas; con energías transformadoras, humildes y colaboradoras. 10 personas que recorren de norte a sur, realizando acciones que buscan elevar la calidad de vida de sus entornos.

Agradezco profundamente a cada uno de ellos, por su cariño, fuerza y compromiso. También a quienes hicieron esto posible (Universidad Andrés Bello y la International Youth Foundation); a los relatores que nos enseñaron técnicas para mejorar nuestro trabajo y a Anita Correa, directora de Acción Joven, por el amor que pone en cada una de sus acciones para que todo sea perfecto para nosotros.




Con este maravilloso refuerzo positivo, mi compromiso es a seguir soñando con fuerza en que un nuevo Chile es posible y a continuar poniendo todo de mí para instalar la felicidad como el principal factor de desarrollo social en nuestro país.

Publicado en www.psicologosvoluntarios.cl el 19 de noviembre de 2013

miércoles, 30 de octubre de 2013

¿Sigues creyendo que el trabajo es una pega?

Te invito a cambiar tu concepto

Estamos comenzando la recta final del año, antes de que lleguen las ansiadas vacaciones de verano luego de tanto trabajo que nos deja exhaustos. Y es justo en este tiempo, donde he tenido la oportunidad de descubrir algo muy sencillo pero a la vez muy significativo respecto del trabajo y que me ha hecho reflexionar.

Grande ha sido mi sorpresa al descubrir el significado de la palabra “Trabajo”.

Trabajo viene de “trabajar” y ésta del latín “tripalium” que significa “tres palos”. En el tiempo de los esclavos, se utilizaba como yugo donde se les azotaba, donde se les hacía sufrir… Sentido me hizo entonces entender por qué le llamamos “pega” a nuestro trabajo y la actitud que muchas veces tenemos frente a ésta.
¿Es que acaso es un castigo por el que merecemos ser azotados? De ser así, no sé ustedes, pero yo saldría corriendo. Me preguntaría ¿qué hicimos mal para merecer esto?


Por otro lado, revisemos la palabra “pega”. Claramente, nuestra primera asociación es relacionarlo a un golpe, sin embargo, la Real Academia Española, también le da otra acepción que muchas veces olvidamos: “acción de pegar”, es decir, adherir una cosa con otra.

Esta última definición de “la pega” me hace mucho sentido. Es la acción de juntar una cosa con otra; una labor con la de otro; un quehacer mancomunado que nos conduce a un resultado final. No puedo evitar que a mi mente venga la imagen del puzzle, donde TODAS  LAS PIEZAS son FUNDAMENTALES para lograr la imagen final.

Y es acaso ¿no es eso lo que hacemos al trabajar? Sumamos. Unimos las piezas de un puzzle mayor. Y no sólo en nuestro quehacer cotidiano, sino que sumamos piezas y construimos sociedad. Unimos lo mejor de cada uno con lo mejor de los demás para hacer país. Nuestro trabajo, nuestra “pega” es mucho más que la simple suma de acciones cotidianas al interior de nuestra empresa u organización. Así, el todo es más que la suma de las partes.


Nuestro trabajo es hacer sociedad.

Siendo así, nuestra “pega” tiene un sentido mayor y esto conlleva también una gran responsabilidad. Cada día construimos presente, y cada día también forjamos el futuro. Realizamos obras que dejan huellas y que dependen de cada uno y de todos a la vez.

La “pega” entonces NO ES UN CASTIGO sino que es un gran OPORTUNIDAD de poner al servicio lo mejor de cada quien. De entregar eso que nos mueve en los más profundo. Por ello es que debemos buscar satisfacer nuestros anhelos y aspiraciones mediante el trabajo. Debemos buscar trabajos que aporten a nuestra felicidad y veremos entonces cómo la felicidad también aporta a nuestro trabajo.

Publicado en http://asexma.cl/sigues-creyendo-que-el-trabajo-es-una-pega/ el 29 d eoctubre de 2013
Publicado en http://www.cetep.cl/web/?p=7103 el 4/11/2014

viernes, 25 de octubre de 2013

Aconcagua Summit 2013 Por un Chile más justo, sustentable y feliz

Del 17 al 20 de octubre, en la mágica y majestuosa tierra de Portillo, en medio de un inimaginable paraíso chileno, se dio cita al 2º Aconcagua Summit.

Más de 200 líderes, de las distintas áreas de nuestra sociedad, tuvimos el regalo de vivir los encuentros más improbables para la construcción de un Chile distinto.
Comenzamos con el CONTEXTO del país en el que vivimos y los distintos temas que nos mueven. Luego, la EMPATÍA, para ir al encuentro de los demás y pasar a la ACCIÓN y al COMPROMISO.
En las alturas, vivimos el amor de aquellos que no podemos permanecer con los brazos  cruzados dejando que la vida pase y luchamos cada día (ahora todos juntos), por cambiar nuestra realidad.
Porque es nuestro anhelo y nuestra responsabilidad construir el país que queremos, Psicólogos Voluntarios, junto a otros miembros del encuentro, nos hemos comprometido a dejar huellas en el alma y a devolver el sentido al quehacer. Por ello, tenemos la responsabilidad de llevar a cabo el Primer Encuentro de Organizaciones Sociales para devolverle el alma a nuestro quehacer social.
Un honor llevarlos a todos en el corazón hacia los sueños más grandes.

domingo, 6 de octubre de 2013

10 Consejos para avanzar en la experimentación de la felicidad en tu trabajo y ¡en todas partes!

En el último tiempo, hemos tenido la oportunidad de compartir
elementos que nos lleven a vivir con mayor felicidad, especialmente en el contexto de nuestro trabajo. Hemos hablado de trabajar con sentido, de la importancia de valorar más a las personas y de su rol central en el valor agregado de las empresas que aspiran a ser la número 1 en el presente. Revisamos también una técnica para disfrutar del quehacer cotidiano y sentir satisfacción con esos “pequeños grandes logros” en el proceso de alcanzar las metas que nos hemos propuesto.

Hoy, quisiera compartir con ustedes, algunas claves para ser más felices. En el último tiempo, han aparecido variados artículos en la prensa que hablan de la felicidad, sus claves o tips para conseguirla. Recordemos primero que la felicidad no se consigue ni se alcanza… menos aún se busca. Simplemente SE VIVE, se hace. Y esto pasa por una decisión personal. Sin embargo, y de ahí, el valor de este artículo, muchas veces no sabemos cómo hacerlo.

Aún cuando en un comienzo no estaba de acuerdo con estos listados, me di cuenta de que ayudan bastante a orientar este cómo.

Veremos qué simple es. Agradezco a quienes han hecho llegar sus comentarios, valorando el descubrimiento de esta simplicidad. Porque ser feliz ES SENCILLO Y POSIBLE:

Aquí van entonces, algunas claves que me han parecido sencillas, alcanzables y de gran valor.

1.- Sé fiel a lo que te propones:
Alcanzar las propias metas y propósitos aumenta nuestra felicidad. Así es como tendrás que ser fiel a tus propósitos y educarte a ti mismo en conseguirlo. Incluye desde levantarse desde que suena la alarma del despertador (a la primera vez) hasta cumplir con las tareas que nos proponemos alcanzar cada día.

2.- Entrega/Da
Está comprobado, según los estudiosos de la felicidad, que uno de los elementos más importantes para experimentar la felicidad, es hacer cosas por otros de manera desinteresada. En tu trabajo (o también en tu hogar), ofrécete para colaborar en tareas que no necesariamente te corresponden pero que le aliviarán la carga a otros.
Y cuando otro haga algo por ti, no importando cuán pequeño sea…

3.- Agradece.
 Harás que la otra persona experimente felicidad y estarás promoviendo un círculo virtuoso de ayuda mutua.


4.- Cultiva amistades.
Es un enorme error pensar que las personas con las que nos relacionamos en el trabajo son sólo compañeros. Ábrete a la posibilidad de cultivar amistades en ese espacio. Más que mal, pasas gran parte de tu día con ellos. Verás cómo descubres nuevas cosas de los otros que pueden complementarte. Logren sacar lo mejor de ustedes, ¡¡¡para ustedes!!!

5.- Recuerda disfrutar.
Disfrutar un nuevo día, el calor del sol en tu rostro, poder contar con comida en tu mesa, quizás la ducha caliente por la mañana o saber que podrás tomar un café al llegar a tu trabajo. Disfrutar de la compañía de los demás, de los desafíos de cada día, de la posibilidad de aprender. De contar con un abrazo de alguien a quien amas o de tener un cómoda cama donde descansar. Disfruta de lo sencillo y cotidiano. No se necesitan grandes lujos. Y destaco el recordar hacerlo porque ¡qué fácil es olvidarlo! Esos maravillosos detalles de cada día NO son obvios. Son un regalo de la vida.

6.- VIVE EL PRESENTE.
El pasado no volverá jamás y el futuro es incierto. Lo único que existe es el ahora. Vívelo.

7.- Ríete lo más que puedas.
Es sencillo y tendrá un favorable resultado en tu cuerpo y ánimo. Por cierto… se necesitan menos músculos para sonreír que para arrugar la frente al enojarte. Así que ni siquiera tendrás que hacer demasiado esfuerzo. ¡Pruébalo! Ya verás cómo incluso tu entorno mejora.

8.- Date tiempo para ti.
Si estás en el trabajo, dedica unos minutos para saber cómo estás y qué necesitas. Si estás en tu tiempo libre, esfuérzate en hacer algo que te guste y no sólo deberes.

9.- Vive el 3x1. La psicología positiva plantea que por 1 emoción o experiencia negativa, busques 3 positivas para encontrar el equilibrio. Si tuviste una falla en el trabajo, busca tres logros alcanzados. No importa si son grandes o chicos. Recuerda que la felicidad no depende del tamaño ni la duración de las experiencias.

10.- Conócete y ámate a ti mismo.

Si no, ¿para quién es la felicidad?


¿Trabajadores con la camiseta puesta? ¡Fortalece sus vínculos!

Cuando pensamos en alcanzar metas (especialmente de productividad), solemos pensar que necesitamos un equipo “con la camiseta puesta” para lograrlo. Este pensamiento no deja de tener razón, pero ¿qué significa esto?
En artículos anteriores hemos hablado acerca de que todos logremos darle sentido a nuestro quehacer para vivir con felicidad nuestro trabajo cotidiano. Lo más probable es que si la empresa en la que trabajamos, sea grande, mediana o chica, nos ofrece un espacio de sentido, entonces tendremos trabajadores comprometidos.
Sin embargo, esto no es lo único que importa.
Los seres humanos somos seres sociales y por lo tanto, la asociatividad es un elemento central en nuestra vida. En términos simples, esto significa que las relaciones que creamos son de gran importancia para nuestro sentido de identidad, es decir, de quiénes somos.
De alguna manera, ¿no es acaso el “quiénes somos” de lo que hablamos cuando decimos “camiseta puesta”?
Las personas podemos comprometernos con ideas (o ideales). Seguro que sí. Pero más aún nos comprometemos con nosotros mismos y con los demás. Nos comprometemos así con personas.
En un momento de dificultad en nuestra empresa, probablemente esperaremos que todos “se pongan la camiseta”, pero ¡ojo! No es sólo la idea lo que nos compromete sino esta asociatividad, nuestro sentido de pertenencia orientado a un ideal o meta. No es un desafío personal, sino un desafío de todos, y alcanzarlo provoca una sensación de logro y dicha que fortalece la motivación. Ya no sólo con la empresa, sino con el equipo. No sólo con la idea sino con las personas. Y esto se trabaja, se construye, día a día. No podemos esperar una “camiseta puesta” de un momento a otro, si no hemos hecho el trabajo para que ello sea posible. Una de forma de lograrlo, es por ejemplo, reaccionar positivamente en los buenos momentos y ante pequeños logros (ya hemos hablado de esto también). Esto también fortalece los vínculos y dota de sentido y motivación lo que hacemos.
Veamos un ejemplo. Imagina un equipo de fútbol. Hay cientos de ellos. Elije el que más te guste. Su camiseta es lo más importante. Lo que motiva a los jugadores. Pero también lo es su equipo. Si pierde uno, pierden todos. Así también cuando se alcanza el logro. Piensa ahora en los seguidores del equipo. La camiseta y el sentido de pertenencia lo es todo. Es parte de su identidad. Es lo que son, cada día; no sólo cuando van al estadio. Y desde ahí están dispuestos a todos.
Si no sólo te importa la productividad sino la felicidad de tu equipo, no te pre-ocupes sino que OCÚPATE de fortalecer sus vínculos; promueve espacios para compartir; promueve las buenas prácticas entre compañeros. Estudios demuestran que hacer felices a otros aumenta nuestra felicidad personal.
En este tiempo de fiestas patrias, fortalezcamos nuestros vínculos, dotemos de sentido (un sentido compartido) nuestro quehacer y no olvidemos que cada día construimos Chile.
¡Muchas felicidades!